I CONCURSO PLAYHOUSE
Organización: Departamentos de Proyectos Arquitectónicos ETSA-UPV, Aula Infancia y Adolescencia UPV, Grupo de Investigación ESSAI
Fecha: 05|11|2014
​
​
Este concurso constituye uno de los primeros pasos de una serie de actividades y reflexiones promovidas desde el Departamento de Proyectos Arquitectónicos de la Universitat Politècnica de València (UPV). El objetivo es fomentar una toma de consciencia en dos direcciones. En primer lugar, desde la importancia de proponer los espacios destinados a los más pequeños a partir de sus necesidades (no solo funcionales sino también cognitivas y sensoriales) y, en segundo lugar, desde la trascendencia que conlleva la toma de conciencia de que educar a los niños a partir de los momentos tempranos en aspectos espaciales, sensoriales, conduce sin duda a formar adultos más completos y conscientes.
​
​
En muchas ocasiones se tiende a pensar que la arquitectura es un ámbito que concierne a unos pocos que se dedican a ella y que por lo tanto no es necesario formarse para entenderla. No obstante, la arquitectura es la disciplina que define el marco en el que vivimos y en el que desarrollamos nuestra actividad. Es por ello que, desde edades muy tempranas, nos atañe a todos. Es también la arquitectura quien configura, o debería cualificar las ciudades, marco por excelencia de la actividades humana hoy en día. No obstante, desafortunadamente, muchos de los que toman las decisiones sobre el devenir y el funcionamiento de éstas, no son arquitectos, o más importante aún, no están formados, o no han desarrollado una sensibilidad hacia ella, lo que implica que no sacan partido de lo que le podrían pedir. Desde nuestro punto de vista, es fundamental que la importancia de la arquitectura, o si se prefiere nombrarla de una manera más abstracta, que la toma de conciencia del espacio, se inculque desde la infancia. Esto, sin duda, conduciría a adultos y ciudadanos más conscientes y capaces de demandar a la ciudad, a los lugares de trabajo y a nuestros lugares de residencia una mayor calidad y adecuación a las necesidades de cada sociedad. La arquitectura no es sólo una actividad económica que permite que unos pocos se lucren, la arquitectura es un hecho cultural y como tal debería convivir con todos nosotros.
​
Por lo tanto, de lo anterior es posible deducir que estas actividades apuntan hacia dos objetivos: uno claramente disciplinar y otro formativo y cultural.
​
Más información
​
​
​
I CONCURSO PLAYHOUSE
Organización: Departamentos de Proyectos Arquitectónicos ETSA-UPV, Aula Infancia y Adolescencia UPV, Grupo de Investigación ESSAI
Fecha: 05|11|2014
​
​
Este concurso constituye uno de los primeros pasos de una serie de actividades y reflexiones promovidas desde el Departamento de Proyectos Arquitectónicos de la Universitat Politècnica de València (UPV). El objetivo es fomentar una toma de consciencia en dos direcciones. En primer lugar, desde la importancia de proponer los espacios destinados a los más pequeños a partir de sus necesidades (no solo funcionales sino también cognitivas y sensoriales) y, en segundo lugar, desde la trascendencia que conlleva la toma de conciencia de que educar a los niños a partir de los momentos tempranos en aspectos espaciales, sensoriales, conduce sin duda a formar adultos más completos y conscientes.
​
​
En muchas ocasiones se tiende a pensar que la arquitectura es un ámbito que concierne a unos pocos que se dedican a ella y que por lo tanto no es necesario formarse para entenderla. No obstante, la arquitectura es la disciplina que define el marco en el que vivimos y en el que desarrollamos nuestra actividad. Es por ello que, desde edades muy tempranas, nos atañe a todos. Es también la arquitectura quien configura, o debería cualificar las ciudades, marco por excelencia de la actividades humana hoy en día. No obstante, desafortunadamente, muchos de los que toman las decisiones sobre el devenir y el funcionamiento de éstas, no son arquitectos, o más importante aún, no están formados, o no han desarrollado una sensibilidad hacia ella, lo que implica que no sacan partido de lo que le podrían pedir. Desde nuestro punto de vista, es fundamental que la importancia de la arquitectura, o si se prefiere nombrarla de una manera más abstracta, que la toma de conciencia del espacio, se inculque desde la infancia. Esto, sin duda, conduciría a adultos y ciudadanos más conscientes y capaces de demandar a la ciudad, a los lugares de trabajo y a nuestros lugares de residencia una mayor calidad y adecuación a las necesidades de cada sociedad. La arquitectura no es sólo una actividad económica que permite que unos pocos se lucren, la arquitectura es un hecho cultural y como tal debería convivir con todos nosotros.
​
Por lo tanto, de lo anterior es posible deducir que estas actividades apuntan hacia dos objetivos: uno claramente disciplinar y otro formativo y cultural.
​
Más información
​
​
​
Espacio, soociedad, arquitectura e investigación
ESSAI
LINEA DE INVESTIGACIóN
REFLEXIONES EN TORNO A LA FORMACIÓN DE LA ARQUITECTURA
​
“El Proceso de Diseño profundiza nuestra comprensión de la sociedad, de su historia, sus valores, anhelos y sueños colectivos. Cuando diseñamos, se nos evidencia la enorme complejidad de llevar adelante este proceso por las incertidumbres y contradicciones que nos depara. Buscando apoyo en nuestras propias convicciones y enfrentándonos a nuestras inconsistencias y no siempre seguros de poder lograr las más plenas concordancias con las exigencias y determinantes de nuestras formas de vida urbanizadas y las necesarias convergencias con los valores, costumbres y diversidades culturales de sus sociedades”
Walter Gropius, Bauhaus en Dessau (1925)
​
​
“Es aquí entonces donde el proceso de diseño se nos revela y muestra de cómo nos permite proponer y concretar nuestros imaginarios y sueños del futuro, a la vez de integrar y de asociar los innumerables valores y cualidades de un territorio con la historia de una sociedad y de hacer concordar e integrar, lo que en un principio se nos aparece como tan diverso y no pocas veces contradictorio y desarticulado. Proceso que hace las veces de ruta estratégica para ir al encuentro de una propuesta, que es como un comprometido grito de autoafirmación de una sociedad con su cultura y su territorio. Y por último nos permite pasar del intuir al saber, del saber al pensar y del pensar a un saber hacer capaz de re-encontrarse las identidades y sueños de nuestras sociedades”
Oscar Niemeyer, Brasilia (1968), Reflections Regarding the design process in architecture
